Lo que antes pasaba inadvertido, ahora comienza a irradiar un fulgor que altera todo a su paso

jueves, 19 de mayo de 2011

contame desde ahí...


El cuarto de mi amiga, mi cama, olor a libro.
Las aulas del Liceo, algo de encierro, algo de sol por la ventana, carpinterías de madera con infinitas capas de pintura, el olor de mi ropa me hacía pensar que estaba en mi casa.
Infinitos lugares; Buenos Aires vacía a la 1, 2, 3, 4 de la mañana huele a fresco, humedad. También a basura.
Febrero tiene perfumes nuevos que hoy son los más cotidianos. Mayo huele a sol de otoño.

No hay comentarios:

Publicar un comentario